7 de noviembre de 2011

¿Sabes qué? yo también puedo hablar mal de ti, puedo soltar los mil y un insultos que conoce este planeta, puedo humillarte aun sin tener razón pero puedo hacerlo, puedo hundirte, y hacer que no te levantes jamás, pero no lo haré.
Porque ¿sabes qué? te tengo un mínimo de respeto como para no hacerlo, y a pesar de todo me sigues importando aunque con cada palabra que leo te aleje mas de mi.
Tu menosprecias todo lo que viviste, todo lo que sentiste, todo, yo lo valoro y lo guardo en el corazón, 
tu faltas al respeto, y yo me clavo una puñalada por cada palabra que sale de tu boca, me preocupo por ti y ni siquiera te pido agradecimiento, solo respeto y en todo caso amistad y sin embargo tu, lo tiras todo por el suelo, sin razón alguna, y si tienes lo que hay que tener para hablar así de mí, entonces me demuestras que no me conoces lo suficiente como para haber intentado algo, y que si lo hubiéramos intentado la habríamos cagado, porque ni yo te conozco como para hablar mal de ti, ni tu me conoces a mi, tu lo haces y yo no, cada persona es un mundo pero eso va a terminar
porque ¿sabes qué? me tengo un mínimo de respeto como para no aguantar tíos como tu.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Mandelo usted a la soberana mierda.

No requiere el más mínimo esfuerzo, simplemente ignóralo.

Lym dijo...

Gracias por el consejo :)
pero solo hizo falta hablar para dejar las cosas claras y todo arreglado, mas o menos jaja
De todas formas gracias persona anónima/o por el consejo y por leer mi blog :3